Los orígenes del proyecto Ganadería Ecológica ISCRA se encuentran en el siglo pasado, a finales de los años 80, cuando empiezan a trabajar en la producción ecológica. Actualmente, Josep y Wolf Rosenow tienen unas 25 vacas madres y un total de 50-60 con crías, bravas, toros y de engorde. Todas ellas paciendo todo el año en zonas estratégicas de prevención de incendios. Se dedican a la raza de la vaca de la Albera, la única raza vacuna autóctona de Cataluña y que se encuentra en peligro de extinción. Una pequeña vaca sobria que es capaz de reducir la carga herbácea y arbustiva de una manera muy eficaz. Al mismo tiempo, cría a sus pequeños y nos da un estrecho margen económico manteniendo la manada joven y vive. La carne de ternera de la Albera es muy buena y sana con bajo contenido en grasa, por lo tanto se puede comparar más con la carne de animal salvaje que con la ternera convencional.
